Empiezo a acostumbrarme a no tener internet en casa.
Ahora dedico tiempo a dibujar, leer, a escuchar más música (y comprar menos), conversar, me voy a dormir prontito... incluso he retomado una afición de la infancia... el ajedrez!! :O
Teniendo en cuenta que la mayor parte del tiempo que utilizamos navegando por el cyberespacio lo dedicamos exclusivamente a chorradas como esta, uno se pregunta si realmente merece la pena pasar tantas horas encandilado frente a la pantalla.